Decía Valentino Rossi tras la carrera de MotoGP del Gran Premio de San Marino celebrado en el circuito de Misano-Marco Simoncelli que “se arrepentía” de haber creado su academia de pilotos. Obviamente y conociendo el carácter simpático y bromista de la gran leyenda del Motociclismo ya se sabe cómo hay que tomarse dicha afirmación, aunque bueno, lo cierto es que le costó un podio.

El de Tavullia decidió embarcarse en este proyecto con su amigo Uccio debido a un alarmante déficit de jóvenes italianos tanto en Moto3 como en otros certámenes de promoción hace unos años, y ya cosechan sus frutos. Con presencia en Moto3 y Moto2, el equipo VR46 es toda una referencia y una incansable factoría de jóvenes talentos italianos que de nuevo pueblan las parrillas y garantizan la continuidad de la tradición transalpina sobre dos ruedas, del mismo modo que pasa con los pilotos españoles.

Y Valentino Rossi ya está recolectando los resultados de sus primeras cosechas. Franco Morbidelli fue hace tres años el primer piloto al que apoyaron y que se proclamó campeón. Y al año siguiente lo hizo Pecco Bagnaia, encima sobre una moto del mismo equipo VR46. Ambos pilotos, ya en MotoGP, superaron el domingo a su maestro sobre la pista y terminaron primero y segundo. Y si no llega a ser por Joan Mir, Rossi hubiese sido tercero en ese podio, repitiéndose una imagen habitual de los sábados en el Rancho de Rossi donde entrena con sus “alumnos”.

En Moto2 las cosas van aún mejor. Los dos pilotos de su equipo no sólo hicieron un gran doblete, sino que dieron un gran espectáculo a base de adelantamientos, lo que por poco no ocasiona un infarto al director del mismo, el español Pablo Nieto. Luca Marini, su hermano, lidera Moto2. Luca está realizando una gran temporada, se le ve cómodo y a poco que mantenga la regularidad que está teniendo, puede dar una nueva alegría. Hay grandes posibilidades de que el año que viene suba a MotoGP con Ducati, aunque de eso hablaremos más tarde. Del mismo modo que pasó el año pasado a Álex Márquez o como le está pasando a Mick Schumacher en la F2, ser hermano o hijo de una leyenda centra sobre uno demasiados focos y eso es una presión añadida, porque no se pondera igual a Luca Marini que a Enea Bastianini, otro grandísimo piloto, otro de los italianos llamados a ser grandes, pero muy alejado del entorno de Rossi.

Marco Bezzechi también ha ganado dos carreras de Moto2 y se reivindica, del mismo modo que Celestino Vieti en Moto3. El VR46 está que se sale.

Movimiento en Ducati y sus equipos

Sin movernos de Italia, la marca Ducati ha hecho público recientemente el fichaje de Enea Bastianini para el equipo Sponsorama. Esto quiere decir que o bien Johan Zarco o Tito Rabat se van a quedar fuera. También tienen la intención de subir a Luca Marini, aunque el propio Rossi ha dicho a su hermano que no se precipite y se concentre en sus objetivos y compromisos para el presente año.

Aún Ducati no ha anunciado quién pilotará su segunda moto del equipo de fábrica, pero parece que dos son los nombres que se barajan, toda vez que la opción de Jorge Lorenzo se ha descartado. Peco Bagnaia y Johan Zarco son los mejores colocados, el primero gana muchos enteros por la forma en que ha regresado de su lesión de Jerez, de este modo, los dos pilotos del Pramac podrían subir al equipo de fábrica. Ya se sabe que una de las motos del Pramac, equipo también con estatus de fábrica, irá para Jorge Martín, mientras que la segunda no tiene dueño y vuelven a sonar los mismos pilotos para subirse en ella. Quizás el gran perjudicado de todas estas maniobras sea el bueno de Tito Rabat, que lleva una temporada muy aciaga.