Tras las puestas de largo de McLaren, AlphaTauri y Alfa Romeo, es el turno de uno de los dos equipos que realmente tiene los mimbres para disputar a Mercedes el dominio de la F1. Red Bull ha presentado el RB16, un coche con un único objetivo, ser campeón y derrotar a Mercedes.

Exteriormente presenta una librea muy similar a la del año pasado, aunque con la ausencia del que era su principal patrocinador, Aston Martin, la marca de coches deportivos de lujo británica que este año tendrá su propio equipo de F1. Por su aspecto, más estilizado en la parte-central trasera, los de Milton-Keynes parece que aspiran a mejorar el paso por curva del coche, por eso los cambios que mejor se aprecian están en la parte media-trasera.

La apuesta de Red Bull es total y eso se ha dejado ver en sus pilotos. Para este año han confiado en un fichaje externo, el del veterano piloto mexicano Sergio Pérez, después de dos años en que los pilotos de su cantera, Pierre Gasly y Alexander Albon, no hayan dado la talla. Lo que habrá que ver es si Checo está a la altura de Max Verstappen en su defecto, traer el máximo de podios y puntos posibles.

Sus propios motores

Este año es también el último de Red Bull con Honda como motorista de forma oficial y directa. La firma japonesa anunció a finales de la pasada campaña su salida de la F1 en 2022 para centrarse en exclusiva en la electrificación y las emisiones cero. La escudería Milton Keynes por tanto desde 2022 seguirá empleando motores Honda, pero gestionados por ellos mismos a través de su nueva división Red Bull Powertrains. Todo ello ha sido posible al aceptar el resto de equipos la congelación del desarrollo de motores hasta 2026.