Más espectáculo fuera de la pista que dentro, esa puede ser una de las principales conclusiones del primer GP de Miami de F1 de la historia. Un aluvión de famosos de todo pelaje en un entorno de máxima exclusividad donde parecía que lo que menos importaba era lo que sucedía en la pista. No obstante, parece que por ahora esta llamativa carrera en términos organizativos tiene visos de quedarse en el calendario y que a partir del año que viene EEUU tendrá hasta tres carreras de F1, pues la categoría reina del automovilismo, quiere hacerse fuerte en ese mercado sea como sea.

El vigente campeón mundial, Max Verstappen, ha sido el primer ganador del GP de Miami al imponerse a un Charles Leclerc a cuyo Ferrari le faltó un poco de velocidad punta para plantar cara a su histórico rival. El duelo Leclerc-Verstappen volvía a repetirse y caía del lado del holandés aunque realmente sólo hubo dos momentos de pelea pura y dura entre los dos. Al principio de la carrera, cuando el de Red Bull pudo aprovechar la caída de rendimiento del neumático delantero del de Ferrari; y a falta de 10 vueltas, cuando Norris provocó el único coche de seguridad de la prueba y Leclerc trató, infructuosamente de pasar a Max, pero no lo consiguió ante la mayor velocidad punta del Red Bull. El monegasco sigue líder del Mundial aunque su inmediato rival ya está a 19 puntos. Ahora le toca a Ferrari empezar a ponerse las pilas con nuevas mejoras, que se esperan para Barcelona, un trazado que a priori le viene bien por la alta carga aerodinámica que tiene. Y es que los de Maranello aún corren con el mismo coche con que debutaron en Bahrein, que va bien, pero que Red Bull se pone las pilas y no les pueden dejar escapar.

Fue tercero Carlos Sainz, imperial y muy superior a su coche y equipo. El español tuvo que pasarse toda la carrera defendiéndose de Pérez y ello le privó de luchar por la victoria, especialmente tras el coche de seguridad de Norris, cuando el mexicano de Red Bull puso neumáticos intermedios y a punto estuvo de adelantarle, pero esta vez Sergio no pudo, se pasó de frenada al intentarlo y ya perdió comba. De no haber sido por la mala parada en boxes, Carlos hubiese estado para más cosas, pero una vez más le tocó la mala suerte. Ya llegará la victoria, y si es en 15 días ante el público de casa, mejor.

El quinto puesto de George Russell le afianza como el mejor piloto del resto. Leve mejora de Mercedes gracias a un circuito rápido. Hamilton fue sexto, pero su compañero sigue mojándole la oreja, George no se ha bajado del top5 en todo lo que vamos de temporada. Mercedes parece que empieza a levantar cabeza, pero lejos de luchar por el Mundial, como Ferrari el año pasado.

Valteri Bottas está viviendo una segunda juventud en Alfa Romeo Sauber. Sensacional séptimo a bordo del coche suizo-italiano que gracias al motor Ferrari está muy por delante de otros equipos con más recursos. Octavo puesto para un Esteban Con que salía último. Su compañero Fernando Alonso fue noveno, pero dos sanciones le apearon de los puntos finalmente. Decepción absoluta en Alpine. 100 carreras dice necesitar el equipo para volver a ganar según el CEO de Renault, Luca de Meo, pero por lo menos podían aspirar al podio. Alonso ha estado muy superior a su coche, con salida marca de la casa incluida, aunque una estrategia pésima con parada en boxes para olvidar. Menudo PLAN. Ricciardo y Albon completaron los puntos.

Como ya se ha escrito más arriba, un accidente de Lando Norris provocó el único coche de seguridad. Pierre Gasly tuvo que retirarse y Mick Schumacher estuvo muy cerca de lograr sus primeros puntos, pero un toque con Sebastian Vettel, su mentor, arruinó la ocasión. Por cierto, preocupante situación en Aston Martin, con los dos coches debiendo salir del pit lane por no tener el combustible a la temperatura adecuada.

Próxima parada en dos semanas en Barcelona, GP de España.