Seat 127, el primer Seat moderno cumple medio siglo

Seat presentó en 1971 el coche llamado a sustituir a sus incombustibles y populares 850 y 600. Se trataba del 127, exacto al modelo que fabricaba Fiat en Italia. Mientras el público pudo conocer el nuevo utilitario del fabricante nacional en el Salón del Automóvil de Barcelona, la prensa especializada tuvo la ocasión de rodar con él en unas jornadas en la isla de Lanzarote.

Su comercialización comenzó en abril de 1972. Supuso una revolución total con respecto a sus antecesores, puesto que Seat -Fiat- sustituía el concepto del todo atrás de sus 600 y 850 -tracción trasera y el motor colocado sobre el eje posterior- por el motor situado delante en posición transversal y la tracción a las ruedas anteriores, o sea, todo lo contrario a lo que el público se había acostumbrado. Era el primer automóvil de este tipo fabricado por Seat, no así por Fiat, que ya había probado esta configuración en el pequeño Autobianchi Primula de 1964.

El 127 contaba con un diseño sumamente atractivo y con cierto aire deportivo. Sus líneas fueron obra del diseñador Nino Manzu, a las órdenes del legendario Dante Giacosa al frente del Studio Fiat. Con sus menos de 3,6 metros la prensa especializada elogió el racional aprovechamiento de su espacio interior, de hecho, el Fiat 127 recibió el galardón ‘Car of the Year 1972’. Las primera unidades sólo tenían dos puertas pese a la forma de su trasera, donde había una tapa de maletero convencional. Un año más tarde se introdujo la carrocería con portón trasero, que gracias a sus asientos abatibles ganaba notablemente en practicidad.

La fabricación del Seat 127 se inicia en 1972 en la factoría de la Zona Franca de Barcelona. Iban equipados con un motor de cuatro cilindros de 903 cc y 47 CV de potencia. Se trataba de una mecánica derivada de la del Autobianchi A112 y, a su vez, del Fiat 850 Spider. En 1974 Fiat encarga a Seat la producción en exclusiva de la carrocería de cuatro puertas del 127, que se exportaría de Barcelona a todo el mundo.

La primera serie del 127 tuvo su vida comercial entre 1972 y 1977 y era fácilmente distinguible por sus grupos ópticos delanteros rectangulares y una calandra con forma de nido de abeja, de idéntica forma, además de las llantas con tapacubos cromados. Se vendía en dos niveles de acabado, ‘Básico’ y LS. En 1977 Seat presenta la segunda generación del 127, fácilmente distinguible por la profusión del uso de sus componentes estéticos en caucho negro.

La segunda serie del 127 se vendía en cuatro versiones de acabado, L, C, CL y CLX. Estaba disponible con los motores de 903 y 1.050 cc. Estuvo a la venta hasta 1982 con carrocería de tres y cinco puertas. Del 127 segunda serie derivaron los modelos Samba y Poder, ambos realizados por el especiota Emelba. El primero era un descapotable al estilo de los coches playeros entonces de moda, como el Mehari de Citroen o el Renault Rodeo, el segundo era un vehículo de trabajo bien con carrocería pick up o furgón cerrado.

Hubo una suerte de 127 tercera serie, bajo la denominación Fura. Su llegada coincidió con la ruptura de relaciones entre Fiat y Seat. El Pura segunda serie con motor 1.430 cc fue un modelo muy raro y de cierta aspiración deportiva. Estaba homologado como Grupo B, pero nunca fue competitivo en los rallys de su tiempo, pero se empleó en una copa monarca de circuitos a nivel nacional. Tras el divorcio Seat-Fiat, ambas firmas siguieron sus caminos por separado, por lo que el sucesor espiritual del Seat 127 y Pura bien podría ser el Ibiza, aunque esa es ya otra historia.