El GP de Azerbayán 2021 se recordará entre los más alocados de la historia de la categoría reina. Cuando todo parecía normal y Max Verstappen con su Red Bull dominaban a placer, a pocas vueltas del final, el holandés sufría un pinchazo cuando rodaba en cabeza, dejando su RB16 B destrozado en pista, lo que obligaba a parar la carrera. Sí antes pasaron cosas, pero lo cierto es que este GP se decidió al completo en una vuelta final. 

Dirección de Carrera y la FIA comunicaron que la carrera sería a una vuelta con salida desde parrilla. Todo se replanteó desde el principio y se respetaría el orden de la última vuelta para la resalida.

Checo Pérez, segundo a la postre, heredó de su compañero de equipo la primera plaza. Hamilton segundo y un sorprendente Sebastian Vettel con su Aston Martin, tercero. Golpe de teatro en la resalida cuando Hamilton se pasaba de frenada en la primera curva siendo adelantado por todos. Así pues tras esa vuelta lanzada, Checo Pérez pasaba el primero por la bandera a cuadros, seguido de Vettel y Gasly completando el podio.

Leclerc, el poleman, quedaría en cuarto lugar, un puesto que se podría ver como meritorio debido al pobre rendimiento de Ferrari. Carlos Sainz, que al principio de la carrera cometió un error, sólo pudo terminar octavo. Mejor suerte tuvo Fernando Alonso en la resalida, que como perro viejo, se arriesgó y terminó sexto. Su compañero Ocon tuvo que abandonar por avería.

La gran debacle fue la de Mercedes, pues a lo de Hamilton hay que añadir la triste carrera de un Bottas desdibujado. Primera vez en mucho tiempo que los Mercedes no puntúan en una carrera.