Ferrari vuelve a regalar una carrera a Verstappen

Ferrari vuelve a pegarse otro tiro en el pie con una pésima estrategia que regala a Verstappen una victoria totalmente inesperada. No ha pasado ni una semana después de que en el GP de Francia Charles Leclerc tirase su carrera a la basura cuando los de Maranello de nuevo han demostrado una nula capacidad para tratar de luchas por el título. Encima esta vez Mercedes se ha sumado a la fiesta y de nuevo se los dos pilotos de la estrella se han subido al podio, Hamilton segundo y Russell tercero.

Pese a la pole de Russell, los dos pilotos de Maranello salían segundo y tercero y con garantías de pasar al británico y llevarse un 1-2 de vacaciones que les permitiese aún seguir algo vivos en el Mundial, pero no fue así. Malas paradas y estrategias equivocadas han dejado a Sainz y a Leclerc cuarto y sexto. Un drama para los italianos que ya apenas pueden optar a pelear por el Mundial, si quiera Mercedes que no les terminan superando. Fallos inexplicables que deberán aclarar. El Cavallino Rampante se va de Hungría de vacaciones con el rabo entre las piernas.

Max Verstappen se ha encontrado con una aún más inesperada victoria, porque salía décimo, pero una vez más, la gente de Red Bull supo leer bien los fallos de sus rivales y situó a su piloto en un lugar privilegiado, estrangulando a Ferrari y obligándole a fallar. Una vez más, se demuestra que los de Maranello llevan demasiado tiempo sin ganar y entre ellos no hay atisbo de cultura de ganar carreras. Salvo catástrofe muy rara, tienen más que perdido este Mundial. Pueden consolarse pensando lo atrás que estaban en 2012 y lo mal que estaban en 2020, pero es que tienen un coche estupendo con el que podrían haber ganado, pero su gestión ha sido nefasta.

Fernando Alonso ha sido octavo y ha terminado por delante de su compañero, Ocon, que ha sido noveno. Pérez ha sido otra vez muy discreto, quinto, y Norris séptimo. Sebastian Vettel ha sido décimo justo en la carrera que comunicaba su retirada al final de temporada. La F1 se despide hasta la última semana de agosto, un varón veraniego de vacaciones donde quizás algunos se tengan que ir al rincón de pensar.