Ferrari ha lanzado recientemente el vehículo llamado a sustituir al SF90, o sea, al primer híbrido echufable de la marca, y primer Ferrari con capacidad para circular en modo cien por cien eléctrico, pues modelos como LaFerrari equipaba un propulsor híbrido pero el sistema eléctrico era como el de la F1, o sea, para agregar más potencia y rendimiento en el motor térmico. Lo más curioso sin duda del nuevo Cavallino Rampante es su nombre: Testarossa.

Testarossa es una de las denominaciones históricas de Ferrari y una de las que más repercusión ha tenido en la cultura popular. Los de Maranello comenzaron a usarla en la segunda mitad de la década de los 50 en los coches de la categoria Sport que disputaban las pruebas de lo que hoy se conoce como Resistencia. Nos referimos en concreto a los modelos 250 ‘Testa Rossa’, 330 TRI o 500 TR, así como los TR60 y TR61. Concretamente hablamos de los coches que los años 1958, 1960, 1961 y 1962 ganaron las 24 Horas de Le Mans. Testarossa se traduce al castellano como ‘cabeza roja’ y se refiere al color de las cubiertas de la culatas de los motores V12 de los vehículos nombrados anteriormente.

El Rey de los 80

Ferrari introdujo por segunda vez la nomenclatura, ya escrita ‘Testarossa’ y no ‘Testa Rossa’, en el año 1984 en su entonces buque insignia, el coche que venía a sustituir al 512 BB y sus derivados, la ‘berlinettas’ equipadas con motor 12 cilindros en V a 180 grados. El entonces nuevo Testarossa mostraba un diseño rompedor de Pininfarina donde destacaba ante todo sus rejillas de ventilación laterales como si las branquias de un tiburón se tratasen. Este coche montaba un motor de 4.9 litros y 390 CV de potencia y rivalizaba directamente con el Lamborghini Countach, al que superaba en refinamiento, calidad de fabricación y funcionamiento, siendo las prestaciones similares. Pero lo que hizo realmente popular al Testarossa fue su aparición en la icónica serie policíaca ‘Miami Vice’, con Don Johnson al volante de un llamativo ejemplar de color blanco, sin duda un coche en el que un porcentaje muy alto de hombres de todas las edades entonces soñaron con tener.

Regreso en máxima tecnología

Mucho se venía especulando con la llegada de un nuevo Testarossa, sobre todo porque hace unos años Lamborghini reeditó con éxito arrollador al también mítico Countach. Pues nada, finalmente, el nuevo Testarossa ya está aquí.

En Maranello aseguran que el diseño se inspira en los coches de Sport de la casa de la década de los 70. Mide 4,72 metros y está disponible con dos tipos de carrocería, el coupé y el Spider descapotable, en este caso con techo duro plegable automático.

En el capítulo mecánico, el 849 Testarossa monta un nuevo motor V8 de 4.0 litros biturbo, Éste se acompaña de otros tres motores eléctricos, uno para las ruedas traseras denominado Generador Unit Kinetic, directamente derivado de la competición, y dos más para cada rueda delantera, ademas de una batería de 7,5 KW. La potencia conjunta es de 1.050 CV y sus prestaciones son 330 Km/H de velocidad máxima y aceleración de 0 a 100 en 2,3 segundos. Por cierto, que este coche tiene etiqueta ECO y homologa 25 Km de autonomía en modo cien por cien eléctrico.

El 849 Testarossa incorpora la última tecnologia en lo que se refiere a sistemas electrónicos para incrementar la experiencia de conducción como es el caso del FIVE, Ferrari Integrated Vehicle Estimator, un sofisticado asistente que ofrece información en tiempo real sobre cómo exprimir las cualidades del vehículo en cada momento. En lo que a neumáticos se refiere, hay tres posibilidades, dos de Bridgestone y una de Pirelli. El nivel de equipamiento y personalización es muy alto y para los más puristas está el acabado ‘Asetto Corsa’, que incrementa aún más el nivel de deportividad.